A comienzos de marzo de 2020, sin invitación alguna, llegó a Uruguay la pandemia del COVID-19, afectando a todos los uruguayos de los distintos rubros, al igual que en el resto del mundo.
El teatro no fue la excepción, la Escuela de Actuación Integral tuvo que cerrar sus puertas de forma momentánea por la seguridad de todos los alumnos y docentes. Sin embargo, no se bajaron los brazos, los cursos continuaron de manera virtual a través de la plataforma Zoom.
El arte es vivencial, el teatro es sentir, es expresar, ¿cómo hacerlo a través de una pantalla? Sin dudas fue todo un desafío para el cuerpo docente que debió reinventarse con la forma de enseñar pero también para los alumnos que se adecuaron al nuevo método.
“Al principio parecía imposible, pero pudimos y superamos el peor momento. No estábamos preparados para algo así, pero todos los docentes están aportando su granito de arena para salir adelante”, dijo Diana Bresque, directora de la Escuela de Actuación Integral.
Se intentó trabajar el módulo correspondiente en cada clase. En los primeros años y taller se enfocó más en la improvisación y sensibilización a través de ejercicios individuales y grupales. En los segundos y terceros años se hizo lo que se llama “trabajo de mesa” y construcción de personajes de las obras que van a hacer en la muestra de mitad de año. Si bien no es lo mismo que hacerlo presencial, la pantalla no fue un impedimento para avanzar con los cursos.
Se empezó con las clases para adultos, pero al mes se le propuso a los padres de los alumnos niños y preadolescentes y muchos dijeron que sí. “Estoy feliz de vernos. Si bien no nos podemos tocar y abrazar, al menos podemos vernos”, dijo una alumna de 8 años en el primer encuentro por Zoom.
“Nosotros sufrimos mucho la situación, ya que se desconocía cuando iba a terminar y aún sigue siendo muy incierto, pero seguimos poniendo todo de nosotros para seguir avanzando”, exclamó Bresque.
Actualmente, se están retomando las clases presenciales de forma gradual, bajo las medidas sanitarias correspondientes. Los alumnos asisten con tapaboca, los salones son desinfectados entre clase y clase y tienen una alfombra con agua jane para limpiarse los pies al entrar. Algunos alumnos se siguen conectando por Zoom, ya que no todos comparten la idea de salir de sus casas aún y otros no se encuentran en Montevideo.
La Escuela de Actuación Integral ya es parte de la nueva normalidad, como todos los uruguayos.